Buenos días a todos. Somos una familia que hace pocos meses que estamos en este hermoso mundo de viajar con la casita a cuestas y siento tener que abrir mi primer entrada al foro con un tema nada agradable. Somos de Extremadura, y este fue nuestro primer verano viajando en Autocaravana. Hemos recorrido nuestra ruta veraniega desde Lisboa hasta Santiago de Compostela, aparcando y pernoctando sin problemas en muchos sitios. Nuestra idea era culminar las vacaciones en los Lagos de Sanabria. Nos habían informado unos colegas extremeños que ellos habían estado pernoctando en uno de los pueblos (Ribadelago) y que al preguntar allí si no había problemas por aparcar y pasar la noche a unos vecinos del pueblo les habían respondido: “Y qué más les da a ustedes, si hacen lo que quieren y aparcan donde les da la gana!!!”.
Nosotros llegamos a Puebla de Sanabria y desde allí nos dirigimos a un sitio donde hay una especie de centro informativo, le preguntamos a una de las personas de información turística si se podía pernoctar con AC y dónde. Nos dijo muy amablemente que está prohibido en los aparcamientos cercanos al lago, pero que en los pueblos no hay problema.
Al poco cayó la noche y decidimos ir a San Martín de Castañeda. Aparcamos en un bajo justo entre la entrada al cementerio y a pocos metros de la iglesia, donde vimos que había otra AC también dispuesta a pasar la noche. A eso de las 2 de la mañana escuchamos como un par de coches daban trompos y pitaban en el terraplén donde nos encontrábamos. Nos despertamos de repente y mi temor era que estuviesen borrachos y que por la tontería nos chocasen. Cuando me asomé por la ventana solamente logré ver un coche, que de noche por supuesto se veía de color oscuro, que se alejaba pero ni matrícula ni nada. Volvimos a dormirnos, y aproximadamente a las 4 de la mañana sentimos como si se nos viniese el techo abajo. Nuestro bebé comenzó a llorar y de inmediato salí afuera: Eran manzanas, pero no dos o tres, sino alrededor de diez y todas lanzadas al mismo tiempo, a nuestra AC y a la de la familia que estaba a nuestro lado (una familia de Cádiz). Al salir vi que de la balconada que está frente al cementerio (que tiene unos 5 metros de alto) salían corriendo unos muchachos. Estábamos como en la boca del lobo, ya que para ver quién había sido teníamos que darnos toda la vuelta con lo cual les dábamos tiempo hasta de irse del pueblo. A la otra familia además de los manzanazos vinieron por detrás del cementerio y le dieron golpes a su AC gritándoles: “Iros de aquí!!!”. El hombre cuando pudo reaccionar salió afuera y al igual que yo los vio huir, entonces encendió el motor y dio las pitadas de auxilio y nada más pasar 3 minutos se asomó un chaval de unos 20 años por la balconada diciendo que apagásemos el motor que quería dormir. En ese momento se podrán imaginar nuestra reacción (yo particularmente con mi bebé llorando, mi mujer intentando calmarlo y al igual que mi compañero con mucha impotencia) que seguramente era uno de los sinvergüenzas que nos estaba vacilando. Inmediatamente llamamos a la Guardia Civil comentándoles el hecho y pidiéndoles que por favor viniesen y nos escoltaran para salir del pueblo! Yo personalmente no sabía de qué eran capaces estas personas! Luego de una hora aprox. llegó la GC (venían desde Puebla de Sanabria) y nos escoltaron hasta El Puente. Al día siguiente en El Puente fuimos a presentar una denuncia (ya que SM de Castañeda es una alquería (creo) y no tiene GC ni policía. Cuando comenzó a tomarnos la denuncia el guardia nos dijo: “Era un Opel color negro el coche que daba trompos y pitaba?”. Y eso me dio la pauta de que ya saben quiénes son y que no es la primera vez que ocurren actos similares al nuestro. Conclusión: una de las manzanas (que eran manzanas verdes arrancadas del árbol, que parecen como piedras) nos averió la placa solar y en el techo nos quedó aboyado. Sin dudarlo al día siguiente nos fuimos de toda esa zona, nosotros a terminar nuestro viaje en Bragança (que dicho sea de paso tiene un área gratuita con todos los servicios para AC al lado del castillo) y la otra familia se volvieron para Cádiz, con un sabor muy amargo, y sinceramente yo por mi parte sin ganas de volver.
Sinceramente comparto mi experiencia porque no nos gustaría que cosas de este tipo les vuelva a ocurrir a nadie (más que nada pienso en toda la gente mayor que viaja con su AC, y lo que puede generarles un disgusto así).
Muchas gracias y discúlpenme si lo he hecho muy extenso.
Nosotros llegamos a Puebla de Sanabria y desde allí nos dirigimos a un sitio donde hay una especie de centro informativo, le preguntamos a una de las personas de información turística si se podía pernoctar con AC y dónde. Nos dijo muy amablemente que está prohibido en los aparcamientos cercanos al lago, pero que en los pueblos no hay problema.
Al poco cayó la noche y decidimos ir a San Martín de Castañeda. Aparcamos en un bajo justo entre la entrada al cementerio y a pocos metros de la iglesia, donde vimos que había otra AC también dispuesta a pasar la noche. A eso de las 2 de la mañana escuchamos como un par de coches daban trompos y pitaban en el terraplén donde nos encontrábamos. Nos despertamos de repente y mi temor era que estuviesen borrachos y que por la tontería nos chocasen. Cuando me asomé por la ventana solamente logré ver un coche, que de noche por supuesto se veía de color oscuro, que se alejaba pero ni matrícula ni nada. Volvimos a dormirnos, y aproximadamente a las 4 de la mañana sentimos como si se nos viniese el techo abajo. Nuestro bebé comenzó a llorar y de inmediato salí afuera: Eran manzanas, pero no dos o tres, sino alrededor de diez y todas lanzadas al mismo tiempo, a nuestra AC y a la de la familia que estaba a nuestro lado (una familia de Cádiz). Al salir vi que de la balconada que está frente al cementerio (que tiene unos 5 metros de alto) salían corriendo unos muchachos. Estábamos como en la boca del lobo, ya que para ver quién había sido teníamos que darnos toda la vuelta con lo cual les dábamos tiempo hasta de irse del pueblo. A la otra familia además de los manzanazos vinieron por detrás del cementerio y le dieron golpes a su AC gritándoles: “Iros de aquí!!!”. El hombre cuando pudo reaccionar salió afuera y al igual que yo los vio huir, entonces encendió el motor y dio las pitadas de auxilio y nada más pasar 3 minutos se asomó un chaval de unos 20 años por la balconada diciendo que apagásemos el motor que quería dormir. En ese momento se podrán imaginar nuestra reacción (yo particularmente con mi bebé llorando, mi mujer intentando calmarlo y al igual que mi compañero con mucha impotencia) que seguramente era uno de los sinvergüenzas que nos estaba vacilando. Inmediatamente llamamos a la Guardia Civil comentándoles el hecho y pidiéndoles que por favor viniesen y nos escoltaran para salir del pueblo! Yo personalmente no sabía de qué eran capaces estas personas! Luego de una hora aprox. llegó la GC (venían desde Puebla de Sanabria) y nos escoltaron hasta El Puente. Al día siguiente en El Puente fuimos a presentar una denuncia (ya que SM de Castañeda es una alquería (creo) y no tiene GC ni policía. Cuando comenzó a tomarnos la denuncia el guardia nos dijo: “Era un Opel color negro el coche que daba trompos y pitaba?”. Y eso me dio la pauta de que ya saben quiénes son y que no es la primera vez que ocurren actos similares al nuestro. Conclusión: una de las manzanas (que eran manzanas verdes arrancadas del árbol, que parecen como piedras) nos averió la placa solar y en el techo nos quedó aboyado. Sin dudarlo al día siguiente nos fuimos de toda esa zona, nosotros a terminar nuestro viaje en Bragança (que dicho sea de paso tiene un área gratuita con todos los servicios para AC al lado del castillo) y la otra familia se volvieron para Cádiz, con un sabor muy amargo, y sinceramente yo por mi parte sin ganas de volver.
Sinceramente comparto mi experiencia porque no nos gustaría que cosas de este tipo les vuelva a ocurrir a nadie (más que nada pienso en toda la gente mayor que viaja con su AC, y lo que puede generarles un disgusto así).
Muchas gracias y discúlpenme si lo he hecho muy extenso.
Comentario