Hola amigos, en el precioso Valle de Ansó, se encuentra el Refugio de Linza, un lugar precioso, rodeado de cimas pirenaicas impresionantes y de un fantástico hayedo-abetal que lo convierte en un lugar muy bonito para disfrutar de la naturaleza.
De la población de Ansó, sale la carretera que va al Refugio de Linza. Primero empieza siendo un valle muy estrecho, pero a medida que vas llegando al final, va abriéndose, acabando la carretera en el refugio, que es el final del valle.
Antes de llegar al refugio, hay una zona de aparcamiento, donde encontramos sitio al lado de un par de autocaravanas y unos campers. Este lugar tiene una gran actividad, tanto en invierno ya que se practica mucho esquí de fondo, como en verano, por sus excursiones montañeras.
Podemos encontrar varias rutas, de niveles más exigentes y para hacer en familia. Para los que hagan alta montaña, hay las cimas de Petretxema (2371m) La mesa de los tres reyes ( 2444m) o el Atxerito (2362m).
Una ruta no demasiado exigente, es la del Bosque de Gamueta, una bonita y tranquila ruta circular que recorre todo el bosque. El camino comienza en el refugio y el primer tramo es de una subida un poco pronunciada y va subiendo hacia el Paso del Salto del Caballo, una vez aqui, el camino ya discurre más llano, continuando hasta cruzar los bosques, prados y arroyos, hasta enlazar el final de la pista de Gamueta. Es una ruta de unos 7.5km y de unas dos horas de duración.
Gamueta, constituye un importante paraje natural y está considerado el mayor bosque de hayas y de abetos de todo el Pirineo aragonés. Se trata de uno de los últimos refugios para varias plantas y animales en peligro de extinción, y del mayor conjunto de árboles monumentales de Aragón. El hayedo de Gamueta es un paraje donde la intervención humana ha sido escasa y, por tanto, conserva las características estructurales originales que son propias de estos entornos naturales. Es por ello que este bosque es único y singular.
Tambien hay otro sendero adaptado a personas de movilidad reducida, que tambien resulta apropiado para ir con niños de corta edad. El sendero es de superficie lisa, con zonas de descanso, mesas y sillas y se adentra en un bosque de hayas precioso, llegando al barranco de petrechema. Es un recorrido corto y sin ninguna dificultad, pero muy bonito.
Para los que seais aficionados a la escalada de paredes de piedra, donde se encuentra el parking hay una zona donde se puede practicar, tanto para niños como para adultos.
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Un beso.